La casa estå muy cerca de las rutas mås transitadas de la isla. Los dueños de la casa se portaron fenomenal, nos dejaron una botella de vino, bombones, fruta y todo lo necesario para un desayuno, preparar unas ensaladas, etc.
Por poner un pero, la casa tiene zonas de poca altura, las personas muy altas deben tener precauciĂłn y en tiempo frio necesitarĂa una fuente de calor.