Gran estancia. Los anfitriones son sumamente acogedores y amables. Las terrazas son sĂșper, sobre todo la de la planta de arriba, para disfrutarla por la tarde noche, o incluso el desayuno. Al contar con garaje y piscina es muy cĂłmodo olvidarse de coche y andar un poco, o bañarse dentro del residencial con su chiringuito (hasta tiene una barra dentro de la piscina, aunque no puedes pagar con tarjeta ni bizum). En resumen, hemos disfrutado la estancia, y el duplex da juego para disfrutar las distintas horas del dĂa.