La casa es una maravilla, amplia, bien decorada y muy acogedora, con la única pega que no dispone de leña para la chimenea ni carbón para la barbacoa.
En lo que respecta al trato con el dueño, Jesús, estamos muy descontentos.
El primer día se estropeó la caldera de uno de los apartamentos, por lo que no disponíamos ni de agua caliente ni de calefacción.
Jesús, el dueño, no se molestó en poner solución a esto, argumentando que los sábados no hay servicios técnicos de mantenimiento. Su solución fue que nos duchásemos en otra casa que también teníamos alquilada, sin ni siquiera preguntar si tendríamos algún problema.
En cuanto a la calefacción, no tuvimos ese servicio en todo el fin de semana y realmente hacia frío por mucho que Jesús nos dijera que él en su casa no ponía la calefacción aún y que no era necesaria por esa fecha.
El problema esta en que nosotros contratamos unos servicios los cuales no tuvimos y no se pusieron medidas para intentar resolverlo. Sobra decir que el precio fue el mismo.
Quedamos muy descontentos con la atención, amabilidad y falta de profesionalidad.